sábado, 22 de septiembre de 2007

Septiembre

Llega Septiembre y todo parece vivir un estado de catarsis. Esplendor y pasarlo de lo lindo, eso significa para mi este mes. La semanita de vacaciones se convierte en un carrete indefinido. Porque de repente deberíamos pensar en cambiar nuestros estandartes, y acompañar a la Bandera con una gran mesa llena de nuestras delicias típicas.

En septiembre reaparecen personajes y uno se puede dar los gustos que durante el invierno suelen desaparecer. De esta forma vemos nuevamente al maestro del cuchufli barquillo, el cabro chico comiendo helado, la tía de los churros con azúcar flor y nos seduce el olor a caramelo de la máquina de algodones. La gente despierta de su temporada de hibernación y sale a las calles, se toma una chelita, comparte con sus compadres y la comadrita.

Septiembre copete, comida y bailoteo. Los hombres se deleitan al ver más piel, huele a verano. La cueca pasa a segundo plano y para qué decir la sagrada Parada Militar que tiene menos rating que Mekano en su último mes de transmisiones.

Pille una buena mesa, arremánguese las mangas de la camisa y póngase un buen babero.
¡Bienvenidos al banquete!























1 comentario:

diario de un caminante dijo...

Bien, si el tema es la comida típica, y pese a que me parece atractiva, sacaría de entrada la imagen 1, del volantín. No tiene nada que hacer, por mucho a que el objeto sea un símbolo de Septiembre, la "chilenidad", la fiesta patria, etc.

Imágenes mejor logradas: 2 y 4. Quizás molesta un poco la espalda del papá, pero es un detalle menor frente al bello contraluz y el gesto del niño... tal vez habría que haberse centrado en él. El vendedor de palmeras y pan de huevo, a su vez, está bien encuadrado, escoges un ángulo perfecto, quizás lo óptimo habría sido desenfocar el fondo, el edificio que distrae. El único problema en ambas imágenes: Pienso en vacaciones, en playa, verano... y ninguno de los dos es considerado una comida o dulce típico chileno... no al menos uno que asociemos con SEPTIEMBRE exclusivamente. Lo mismo sucede con la última foto: niño y helado.
Así las cosas, nos va quedando la familia que, de no ser por los adornos de fondo, sólo es una familia comiendo; el carro de churros (mero registro, no una imagen en sí atractiva), y la empanada x 2 (en una supongo que se trata de algún familiar). Como sucedió con la mayoría, considero que en vez de sumergirse en el tema, de hincarle el diente, se optó por aprovechar el lugar donde pasaron el feriado largo para "hacer algo" que medianamente sirviera. Corrígeme si me equivoco y es el mío sólo un prejuicio.